Corta la calabaza por la mitad, saca las semillas, coloca las dos mitades en una bandeja para hornear cubierta con papel antiadherente con el lado cortado hacia abajo y hornea durante 45 minutos.
Una vez cocida, la pulpa de calabaza se habrá separado de la cáscara. Ponla en un procesador de alimentos y triturala hasta obtener un puré cremoso.
Guarda el puré de calabaza en la nevera durante 5-7 días o congelalo por 3-6 meses.